La refrigeración y congelación son técnicas fundamentales para detener el proceso de descomposición y mantener la frescura de los alimentos. En CPA, destacamos la importancia de:
- Refrigeración: Conserva alimentos frescos a temperaturas entre 0 °C y 8 °C, ralentizando el crecimiento microbiano. Ideal para frutas, verduras y carnes.
- Congelación: Almacena productos a temperaturas inferiores a -18 °C, evitando la proliferación de bacterias. Perfecto para pescados, mariscos y carnes congeladas.
- Control preventivo: Monitoree compresores y sistemas de ventilación para mantener el rendimiento óptimo de sus cámaras.
Estas soluciones no solo garantizan la seguridad alimentaria, sino que también optimizan costos operativos y aseguran la satisfacción del consumidor. Con CPA, su negocio estará respaldado por expertos en refrigeración comercial e industrial.